Aprendí a leer y mi soledad encontró compañía, el silencio se pobló de voces, el vacío se llenó de fantasías.
En los libros encontré lo que necesito, ahora es mío el mundo y hasta una porción de la eternidad.
Como dice el poeta “Poseo dragones, dioses y lunas”.
Me he imaginado grandes romances, en arrebatos místicos, en la entrega revolucionaria y en el fuego de la poesía.
Me imaginé el placer y no solo viví todas las pasiones sino también la diversidad de sus matices.
Sara Sefchovich